Las aventuras de Thomas Pelz
LAS AVENTURAS DE THOMAS PELZ Era bien tarde por la noche, las nubes en el cielo pasaban volando lentamente, sus colores grisáceos se veían gracias a la luz de la luna llena. El mar azul marino se movía como miles de gaviotas finas, Thomas Pelz estaba sentado en su silla de madera pensando en el pasado, se acordaba como habían encontrado el tesoro con Miguel Río, y como se lo devolvieron a la reina Isabel. Como recompensa les regalaron una bolsa con monedas de oro a cada uno. Con ese dinero Thomas había puesto un bar en el centro de Londres y se había comprado una casa cerca del puerto principal, en una residencia con vista panorámica. Todos los días miraba las olas del mar como avanzaban y no se detenían nunca, casi hipnotizado por su belleza y tranquilidad recordaba su vida cuando joven, trabajaba en un barco comerciante. — ¡Thomas, Thomas! Gritaba: el capataz de la embarcación, es la hora de zarpar, vamos a Kenting, necesitamos que cargues los baúles de madera para que no d...